Escuchamos el sonido de la puerta principal abrirse. Zayn se puso de
pie agarrándome de las nalgas y después deslizó mis piernas hasta
que mis pies tocaron el suelo. Dejó un beso en mi frente y se separó
de mí.
- Debe ser mi abuela.
- Hola – saludé tímidamente alzando la mano.
- Hola – su sonrisa regresó – ¿interrumpí algo?
- No, abuela, no. Hablábamos de cosas nuestras – le dijo Zayn acercándose a ella y dándole un beso en la mejilla.
- ¿Te quedas a comer? - me preguntó alegremente.
- Mmm, muchas gracias Sra. Malik pero …
- Oh, por favor, llámame Vivianne, y no aceptaré un no por respuesta – suspiré.
- Está bien – sonreí – ¿puedo ayudarle?
- ¡Claro! Te espero en la cocina.
Vivianne salió de la habitación volviendo a dejarnos solos a mí y
a Zayn. Su mirada voló a mi rostro, rodeó con su brazo mi cintura y
juntó nuestras frentes provocando que su nariz rozara con la mía.
Sonrió y dejó escapar el aire contenido.
- Te dije que te tocaría comer con nosotros algún día.
- Me da vergüenza – el rubor llegó a mis mejillas.
- Mi abuela ya se hace una idea de que no somos solo amigos, pero no creo que te haga preguntas acusadoras, suele ser discreta. Mi hermana es otro mundo …
- Oh, oh, ¿qué debo decir?
- La verdad – se encogió de hombros – pero sin extenderte mucho.
- Vale – suspiré.
Inclinándose presionó sus labios con los míos. Me soltó dos
segundos después y salimos del dormitorio para ir a la planta baja.
Saludé a Waliyha, estaba en el sofá viendo la televisión. Zayn se
sentó con ella y yo me fui a la cocina para ayudar a su abuela.
Todos los ingredientes ya estaban preparados en la encimera y la
señora Malik se paseaba de un lado a otro para cocinar. Me acerqué
a ella y me puse a su lado.
- Bien ____, espero que te guste el pollo con arroz y verduras.
- No se preocupe, no soy muy delicada para la comida – sonreí – ¿con qué le ayudo?
- Oh, no hace falta cielo – dijo con ternura. Me miró sonriente – pero si quieres puedes ir picando el pimiento – me tendió un cuchillo.
Me deslicé por la cocina y sobre una tabla empecé a hacer tiras y
después pequeños cuadritos de pimiento. La abuela de Zayn me
estudiaba mientras cortaba la verdura afirmando y sonriendo.
- ¿Sueles cocinar en tu casa, ____?
- Desde pequeña hago de pinche – afirmé – cortar verduras es ya una especialidad – bromeé – solo de vez en cuando hago de cocinera, no es que tenga mucho tiempo.
- Claro – sonrió – el instituto.
Seguimos cocinando mientras charlábamos y ella me daba instrucciones
sobre que hacer. Llegué a estar muy cómoda ya que Michelle hacía
bromas continuamente y me contaba incidentes suyos en la cocina. De
alguna manera llegamos a hablar de Zayn …
- Él nunca había traído ninguna amiga a casa – dijo removiendo el contenido de una cacerola – aunque creo que sois algo más – sonrió abiertamente y yo me sonrojé – me alegra, pareces buena chica, realmente creo que puedes hacerle bien a mi nieto … sobre todo después de todo de lo que ha salido – añadió en un susurro.
- ¿Se refiere … al accidente de sus padres?
- Oh, eso es en buena parte, cuando mi pobre hija y su marido se fueron de este mundo Zayn recibió un buen golpe, maduró a la fuerza – pude sentir su angustia al contar sus recuerdos – pero …
- Huele delicioso – Zayn me abrazó por detrás – tengo hambre.
- Falta poco – le anunció Vivianne – dile a tu hermana que ponga la mesa.
- Ven conmigo – susurró Zayn en mi oído cogiendo mi mano.
- ¿Necesita ayuda en algo más, Sra. Ma... Vivianne?
Rogué por una respuesta afirmativa. Quería saber más sobre lo que
le sucedió a Zayn, aunque probablemente debía preguntárselo
directamente a él. Para mi mala fortuna, Vivianne negó con la
cabeza sonriente y me dijo que podía irme.
Zayn me llevó hasta el salón de la mano y le dijo a su hermana que
pusiera los platos y los cubiertos en la mesa para los cuatro.
Waliyha me sonrió al darse cuenta de que esta vez si les acompañaría
en la mesa. Me senté en el sofá con Zayn mirando los dibujos
animados que hacía un rato veía Waliyha.
- ¿Qué tal con mi abuela?
- Muy bien. Creo que le he gustado – sonreí tímidamente.
- Pues claro, ¿cómo no ibas a gustarle? – me besó la mejilla – ¿hablasteis de mí?
- Poco, estábamos concentradas en cocinar – me encogí de hombros simulando desinterés.
- ¿Qué te dijo?
- Sabe que somos más que amigos … y se alegra de ello – Zayn puso un gesto gracioso abriendo los ojos – ella piensa que … - bajé la mirada – que tú estás saliendo de un bache por tu pasado – Zayn alzó mi barbilla serio – y que yo te estoy ayudando.
- Especifica, ¿qué dijo exactamente?
- Que lo pasaste mal por tus padres, que cambiaste. Después llegaste a la cocina y no dijo nada más …
Zayn cambió su postura y quedó meditabundo mirando el suelo. Me
daba miedo preguntarle en ese momento, no quería hacerlo sentir mal.
Para mi suerte, Vivianne nos llamó para comer en la mesa. Acaricié
la mano de Zayn y le di una mirada de apoyo. No sabía que pasaba por
su cabeza pero sí que no se encontraba bien, y que yo, no era la
única en esa relación con un pasado difícil.
Comimos tranquilamente conversando entre los cuatro sobre temas como
el colegio, el trabajo y las noticias de última hora que salían en
televisión.
Zayn y yo no tuvimos tiempo seguir hablando a solas y yo tuve que
irme porque me llamaron mis padres. Salí a dar un paseo con ellos y
con Clark para comentar mis notas y los planes de esas vacaciones, en
los cuales, yo no estaba incluida.
Mis padres habían decidido darse una segunda luna de miel por sus
treinta años de casados. En sus bodas de plata no se fueron porque
no se fiaban de dejarnos a mí y a Mike solos en casa, pero ahora
éramos mayores de edad y podíamos cuidar de nosotros mismos.
Se iban todo un mes de turismo por distintas ciudades de los Estados
Unidos. En otras circunstancias hubiese celebrado quedarme sola en
casa, porque Mike lo más seguro no iba a estar mucho tiempo allí
sino con Kayla, pero en esos momentos en los que estaba siendo
acosada no me sentía muy segura de lo que iba a hacer.
Para aumentar mi temor, en el buzón había un sobre sin remitente
con mi nombre. Al abrirlo cayó una nota. <<Mira quién
regresó! Adivina que pasará ahora ;) Atte. MF>>
Miré el interior del sobre. El corazón me dio un brinco al ver
varias fotos. Justin aparecía en todas ellas y al juzgar por los
alrededores, estaba en Delaware. Justin se veía tan serio como yo
estaba acostumbrada a verlo, con su frecuente nota de preocupación,
con su punto de autosuficiencia … pero con ojeras y desarreglado;
aún así, por irritante que fuera, se veía sexy.
¿Qué iba a pasar? ¿Qué se estaba proponiendo ese lunático de MF?
¿Qué Justin volviera tenía consecuencias? Recordé la otra carta.
Sí, sí que las tenía. MF estaba sediento de venganza. ¿Y si
Justin no sabía nada? ¿Y si él estaba en peligro en ese mismo
instante? “No, no puede ser” Me grita el subconsciente.
Sin meditarlo, el impulso de ir a comprobar por mis propios ojos la
realidad me domina, y me subo a mi coche para conducir hacia la zona
residencial que había estado evitando durante tres meses.
Las persianas de su apartamento estaban abiertas. Me quedé dentro
del coche observando los alrededores por si había alguien extraño
vigilando o por si alguien salía del apartamento.
Nada de aquello pasó, pero por el balcón se asomó Justin. Lo
estaba viendo, después de cinco meses que se sentían como años sin
verlo, podía contemplar por mis propios ojos que estaba bien.
Me abracé por la cintura intentando protegerme de las sensaciones
que empezaban a revolotear en mi interior.
“Maldita sea … ¿qué hago aquí? ____, te estás torturando tú
solita. Justin se puede cuidar él mismo, ya te lo dijo y te lo
demostró antes de que te dejara tirada y dejara claro que no le
importabas una mier*da. Además, tiene a Rebecca y a todas las
pe*rras que a él le de la gana para desahogarse. Tú has estado
enfrentando todo esto sola, ahora que él se busque la vida. Ya se
enterará de quién es MF por sí solo … eso si no ha hecho ya!”
Miré una vez más hacia arriba. Como si sintiera mi mirada en su
cuerpo bajó la vista y me vio. Noté la alarma en los músculos de
su rostro. Justin salió disparado. Quizás estuviese apunto de salir
a la calle para encontrarme, pero lo único que hallaría iba a ser
el vacío en el aparcamiento.
* * *
Estaba acompañando a Ally y Marcie en las tiendas del centro
comercial. Querían comprarse los últimos detalles para la fiesta de
graduación. Habían estado toda la tarde insistiendo en que les
acompañara, pero era seguro que no iba a ir.
Zayn al ver mi poco ánimo por la graduación me propuso un plan más
tentador. Íbamos a tener un día entero para nosotros, pero no tenía
claro lo que haríamos, simplemente iba a dejarme sorprender.
Mis padres se habían ido esa misma mañana temprano con una
caravana, el sueño de mis padres … viajar sobre cuatro ruedas por
todo el mundo. Mike por su parte parecía que iba a mudarse con
Kayla, pasaba más tiempo en su casa que en la nuestra. Por lo cuál,
estaba sola, aunque mi madre le pidió a la vecina que me controlara.
Si hacía una fiesta llamaría a la policía y me comería el marrón
yo solita.
No me venía mal una tarde de chicas. Teníamos que arreglarnos y
podíamos hablar y hacer locuras sin restricciones ni límite de
tiempo, de hecho, las invité a pasar la noche.
Ally, finalmente le pidió a Lucas que le acompañara al baile, y con
aquello se avecinaba una reconciliación.
Pasamos el día probando peinados, arreglándonos las uñas,
conjuntando accesorios con sus vestidos y haciendo tonterías.
Dormimos juntas, y yo estuve tranquila porque pensaba que nadie me
atacaría con ellas ahí.
A la mañana siguiente ellas se fueron a sus casas tras desayunar y
yo me arreglé para ir a casa de Zayn. Me puse unos mini-shorts
vaqueros y unas Converse con una camisa de tirantes blanca. Mientras
me peinaba, sonó el timbre. Tras la puerta estaba Zayn. Clark salió
enseguida del salón y fue a saludarlo colocándose en sus pies.
- Hola super-héroe – se agachó riendo para acariciarlo – ¿has cuidado de mi chica?
- Lo hace siempre – sonreí. Zayn se levantó y colocando su mano en mi cuello se aproximó para besarme.
- ¿Pasaste un buen día de chicas?
- ¿Aún estás enfadado? - reí y le hice pasar para cerrar la puerta.
- Un día sin hablarte ni verte … ¿tú que crees?
- Que te tengo muy mal acostumbrado – me burlé. Él hizo un puchero – oh, vale yo también te eché de menos, ¿eso querías oír?
- Exactamente – torció sus labios y me dio un repaso. – Te ves muy sexy.
- Puedo decir lo mismo sobre ti – me mordí el labio.
Su pelo oscuro estaba desordenado y junto a su camiseta negra ceñida
a los marcados abdominales, era pura atracción. Además llevaba un
pantalón de estilo militar que cubría hasta sus rodillas.
- Mmm … ¿y tus padres?
- Se fueron de vacaciones. Estaré sola por un mes – me sonrojé. Ambos estábamos pensando en lo que podía suceder en mi casa, los dos juntos, solos – ¿A donde vas a llevarme?
- Al lago – me cogió de la cintura – ¿por qué cambias de tema? ¿te has puesto nerviosa?
- ¿Yo? No. Ni que no supiera tomar el control – me crucé de brazos ocultando mis manos.
- Ya veo – besó mis labios con su sonrisa torcida – será mejor que salgamos, vine en la moto.
Lo primero es que esta novela cada ves esta mejoor, me encanta.
ResponderEliminarNose como solo con 19 capitulos me he podido enganchar tanto la verdad.
PD: espero que Justin y _____ hablen sobre MF, pero solo esoo, nada maas.
PD2: Me encanta la pareja que hancen ____ y Zayn.
PD3: eres la mejor en seri sigue asii.
PD4: Siguiiente.
PD5: muchos besitos :)
Me encanta sigueela :)
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